El derrame de petróleo dejó a miles de personas sin acceso a agua potable, salud ni condiciones básicas de protección. Este proyecto respondió de forma urgente y coordinada para garantizar el derecho al agua, brindar atención médica y acompañamiento psicosocial a las comunidades más afectadas, especialmente mujeres, niños, adolescentes y personas adultas mayores.
En este boletín compartimos los resultados, aprendizajes y testimonios que demuestran que, incluso en medio de la crisis, es posible actuar con humanidad, eficacia y justicia.